Oye tú, así no se escribe ese emoji.

¿Sabes que sería irónico y gracioso? Que esta entrada tenga errores ortográficos y gramaticales. Porque justo esto va de eso. Lo que nadie pidió pero todos necesitábamos: Cuál es la posición de un emoji en una oración escrita de forma gramaticalmente correcta.
Sólo imagínate. Te encuentras enfrascado en una frívola conversación de WhatsApp. El ochenta por ciento de esa conversación han sido stickers —la mayoría de gatitos—. De pronto la flojera de escribir palabras te provoca usar un emoji para expresar gráficamente lo que no quieres expresar gráficamente con letras; así que tipéas ese flamante emoji. Pero dios nos libre, tu ignorancia —nunca mejor dicho— hace que lo pongas de la forma que no va. 😱
Vale, el mundo no se va a acabar por eso. De hecho, seguramente la persona con la que hablas también ignora cuál sea el procedimiento adecuado y simplemente no note el error. Es más, quizá incluso eres de los que ponen “k” en lugar de “que”. Puede que hasta seas republicano. O de esos de los que escuchan la radio pública. En definitiva el saber la posición de un simple emoji no es como que sea lo más importante.
Sin embargo, queramos o no, los emojis llegaron para quedarse. Y queramos o no, los emojis ya han modificado la forma en que nos expresamos, influyendo directamente en el lenguaje. Es decir, por más vegana que sea una persona, jamás va poner que esa mañana se comió una enorme 🍆, por más literal que sea el hecho de que esa mañana se comió un platillo a base de berenjena, digamos berenjena a la plancha acompañada de ensalada con crutones sin gluten. O si lo hace es porque esa persona ha vivido abajo de una piedra los últimos diez años.
El uso de emojis está tan normalizado, que es seguro que los has visto en los títulos sensacionalistas de tus bloggers y youtubers favoritos, tipo: “Súper🔥10 celebridades en traje de baño, la numero 7 te hará sudar”. Lo mismo en publicidad, sobre todo la que te llega por correo, o la que arbitrariamente google pone en tu bandeja de Gmail a la altura de tus correos recibidos.
Seguro que no hay tanto drama si se trata de una conversación informal en un chat. Normalmente en ese tipo de conversaciones no nos preocupa abrir preguntas —¿— o admiraciones —¡— o usar mayúsculas, comas, puntos y punto final. ¿Pero qué hay si alguien intenta aplicar emojis en una obra literaria? ¿Que pasa si algún poeta —los poetas son raros— pretende escribir poesía usando emojis?
La finalidad de la ortografía y la gramática no es molestarnos con un puñado de reglas sosas o elitistas. La finalidad de la ortografía y la gramática es transmitir un mensaje de manera correcta, de modo que cualquier persona que lo lea entienda exactamente lo que queremos comunicar, sin ambigüedades, malos entendidos o múltiples interpretaciones.
Nuestras generaciones son las primeras que se topan con este dilema. Es lógico esperar que con el tiempo la situación se iba a estandarizar, y una de las primeras instituciones encargadas de la lengua ya está tomando cartas en el asunto. Ignoro que ocurra con otros idiomas, seguro que ya están en esas, pero por lo pronto la RAE (Real Academia de la lengua Española) ya se ha expresado al respecto.
¿Se imaginan el día en que en las clases de lengua en las escuelas les enseñen a los niños la forma correcta de escribir los emojis? Queramos o no ocurrirá, así nos resistamos. Es lógico y es práctico. Un mensaje que no se entiende no sirve para ser conservado. La suma del conocimiento humano lo tenemos gracias a que fue escrito de una forma en que se puede entender, a pesar de no conocer el contexto y estar separados por el tiempo. De hecho, es gracias a eso que tenemos conocimiento del contexto en que se género tal o cual conocimiento.
Entonces, ¿qué dice la RAE sobre el tema? Dos sencillas reglas fáciles de entender y de aplicar, que te aseguro harán que tus mensajes sean claros.
Si un emoji afecta a todo un mensaje, se recomienda escribirlo después del punto:
Hola a todos. 🙂
Pero, si solo afecta a la última parte o equivale a una palabra, irá antes:
Eres un ☀️.
@RAEinforma
Un error común es:
Nos vemos en la casa. 🏠
Es redundante. Lo correcto sería sustituir la palabra por el emoji.
Nos vemos en la 🏠.
También:
Estoy en modo fitness 🏃🏻♂️🏋️🍎
El emoji no forma parte de la frase, sino que representa una idea abstracta “modo fitness”, no literal “correr”, “levantar pesas”, “manzana”, y de hecho afecta a todo el mensaje. Por lo que va después del punto.
Estoy en modo fitness. 🏃🏻♂️🏋️🍎
¿Verdad que es fácil y hace que el mensaje se vea mejor?
Intenta aplicarlo, no cuesta nada y ahora tienes un tema de conversación para romper el hielo, ¿o por qué no?, ocupar un espacio de incómodo silencio.